Cada vez es más frecuente que en nuestra sociedad las relaciones sexuales comiencen a una edad más temprana. Actualmente la información sexual que reciben los jóvenes es mucho mayor que en generaciones más longevas, por lo que el temor a las prácticas sexuales por parte de los principiantes es mucho menor. Ello no implica que no tenga que pasarse un periodo inicial de experimentación y aprendizaje para llegar a tener un conocimiento profundo de la sexualidad, tanto por parte de los chicos como de las chicas.
Prevención contra enfermedades y embarazos
El primero de los consejos a tener en cuenta por parte de los principiantes en el sexo es que es necesario mantener relaciones sexuales con total seguridad. Los principales riesgos que se corren al practicar sexo son las infecciones provocadas por enfermedades de transmisión sexual y la posibilidad de quedar embarazada de forma involuntaria. Ambas posibilidades pueden ser prevenidas con el uso del preservativo.
Este tipo de anticonceptivos ofrece un alto grado de fiabilidad en cuanto a la protección que proporcionan y además no tiene efectos secundarios importantes, como puede ocurrir con otros sistemas. El mercado de preservativos es muy amplio y los hay de muchos tipos. Para los principiantes en relaciones sexuales pueden ser muy recomendables aquellos que retardan la eyaculación, ayudando así a disfrutar plenamente de las relaciones sexuales.
El valor de la virginidad
Uno de los mayores valores en determinadas culturas es la virginidad de las mujeres. Tanto para ellos como para ellas, al margen de su cultura y religión, la pérdida de la virginidad supone un paso importante que conlleva una serie de connotaciones que traspasan el terreno de lo sexual. De ahí que sea fundamental escoger bien la persona con la que se va a perder la virginidad, con la que se va a mantener la primera relación completa.
Hay determinados expertos que dan consejos sobre la primera relación completa, indicando que la primera penetración se haga de una forma rápida, ya que la rotura del himen de la mujer puede ser algo más doloroso si la penetración es lenta. De todas formas, al margen de este detalle, lo mejor es ir despacio, iniciando poco a poco el acto sexual y esperando a que ambos estén preparados para el momento en que van a perder la virginidad.
Escoger el momento y el lugar adecuados
Otros de los consejos más habituales para los principiantes es la elección del momento y del lugar donde se van a realizar las prácticas sexuales. Aunque existen muchos lugares donde la primera relación es habitual, hay tópicos muy seguidos por los jóvenes. Lo importante es que el sitio elegido permita crear un ambiente adecuado para que ambos se encuentren totalmente relajados, permitiendo disfrutar de la relación sin preocuparse por otros aspectos.
Cualquiera de los consejos que se puedan dar nunca tendrá el valor de la propia experiencia. Si es posible, no hay por qué tener una relación completa en el primer contacto. Uno de los principales elementos para conseguir una relación placentera es conocer al otro, saber qué es lo que le gusta y qué es lo que no. Cada persona es diferente y conocer las preferencias del otro es la mejor guía.
Diferentes posturas para principiantes
La práctica del sexo requiere de imaginación. Es uno de los componentes fundamentales y la elección de las posibles posturas sexuales ayuda a favorecer la relación. Una vez iniciados en las prácticas sexuales la propia experiencia vendrá a determinar qué posturas sexuales proporcionan un mayor placer a cada miembro de la pareja. Es un mundo por investigar que con el paso del tiempo va abriendo un abanico de posibilidades cada vez más amplio. Existen determinadas posturas sexuales que son más recomendadas para los principiantes.
- La más clásica es la del misionero. La chica está acostada boca arriba y con las piernas abiertas, el hombre encima. Él es el que marca el ritmo, por lo que puede aumentarlo o disminuirlo según sus necesidades y según lo que la chica le indique.
- Otra variante es la denominada profunda. Es similar a la anterior pero en esta ocasión ella tiene las piernas levantadas, siendo mayor la penetración.
- En la postura denominada fusión la mujer está encima del hombre, puede estar sentada o en cuclillas sobre la pelvis del hombre. De esta forma es ella la que controla el ritmo de la penetración, así como la profundidad y la intensidad del movimiento.
- En la postura de la amazona también es la mujer la que tiene el control de la relación sexual. En este caso el hombre ha de estar sentado con los pies en el suelo, ella se coloca encima controlando así el ritmo. Puede sentarse de cara a él o dándole la espalda.
- Otra de las posturas sexuales recomendadas para los que se inician es la cuchara. Ella está acostada de lado y él está detrás. Al realizarse la penetración desde atrás esta es menos profunda. Además la postura posibilita los besos y las caricias, fundamentales en toda relación.
Dar importancia a los preliminares
En cualquier relación sexual son fundamentales los preliminares. Comenzando con besos y caricias el otro siente que además de deseo sexual hay un sentimiento de cariño, lo que facilitará la entrega del uno al otro. Estas caricias pueden llevar a quedar desnudos, es muy efectivo cuando esto lo hacen los dos a la vez y poco a poco. El apetito sexual va de esta forma acrecentándose y el cuerpo se va preparando para tener una relación completa.
Mientras se acaricia hay que ir descubriendo qué puntos son más excitantes para la pareja y poco a poco llegará el momento en que se esté preparado para la penetración. Antes de realizarla, la mujer ha de estar lubricada para evitar que pueda resultar molesto para ella. S obre todo hay que ser pacientes, aunque es cierto que en estos momentos puede resultar complicado, pero no hay mejor consejo que dejarse llevar por los sentimientos y emociones sin prisas.