¿Por qué hay quien piensa que a las mujeres no les puede gustar el porno? A pesar de lo mucho que ha evolucionado la sociedad en los últimos años en lo que a igualdad de sexos se refiere hay una cosa en la que aún siguen latentes esas diferencias: el sexo, valga la redundancia. Parece que el hecho de que la mujer sienta el mismo placer que el hombre no está bien visto.
En algunos ámbitos sigue siendo un tema tabú, con lo que la pornografía lo es aún más. El porno formaba parte de la intimidad, exclusivamente de la masculina. Era algo que sólo se comentaba entre amigos y por lo que uno podía llegar a avergonzarse. Sin embargo, si les gusta a los hombres, ¿por qué no iba a gustarle a las mujeres? Que a una mujer le apetezca ver una película pornográfica no tiene ninguna diferencia con que lo haga un hombre. Tanto uno como otro puede sentir placer viendo escenas cargadas de erotismo.
La gran diferencia es, probablemente, que hasta hace poco eran pocas las mujeres que se atrevían a reconocer que les gustaba ver pornografía. El uso de internet, los foros y webs especializadas han supuesto una liberación en este sentido al haber contribuido de manera considerable a que estos gustos, que eran evidentes y naturales, se hagan cada vez más notorios. También se han convertido en una inagotable fuente de información. El auge de la literatura cargada de erotismo también ha ayudado a que se empiece a desmitificar el hecho de que una mujer pueda sentir placer viendo o imaginando escenas de sexo.
Pornografía para mujeres
En los últimos años se ha avanzado en este terreno y se ha descubierto que no sólo es posible que a una mujer le guste el porno, sino que hay determinados vídeos que están hechos específicamente para este tipo de público. Hasta hace poco la industria del porno tenía al hombre como principal cliente, pero las cosas empiezan a cambiar. Primero se fijaron en el público homosexual y ahora en el sexo que quieren ver las mujeres, sean lesbianas o heteros.
En el porno tradicional las mujeres no son protagonistas, más bien son un ser cuya única finalidad es proporcionar placer al hombre. Ese tipo de fantasía no es la que suele gustar en la vida real a las chicas, por lo que quienes realizan este tipo de cine X le dan una vuelta, convirtiéndola en parte importante de la historia, con deseos propios y sin ser una sumisa. La trama está más cuidada y los personajes mejor construidos así como la decoración, la iluminación, la música, los planos o los diálogos. De esta forma se pueden llegar a conseguir vídeos más cargados de erotismo que aquellos que son más explícitos.
Pero en gustos no hay nada escrito y puede que haya mujeres que sientan más placer viendo vídeos de porno duro y hombres a los que les guste la considerada pornografía para chicas. De igual manera lo importante es disfrutar. Internet está poblado de webs en las que ver vídeos de todas las clases para saber qué es lo que realmente nos gusta. Así que si sientes curiosidad no hay nada mejor que echar un vistazo a lo que nos ofrece la red. Investiga y descubrirás que es lo que más te gusta.
Dudas sobre vídeos porno
- Me apetecer ver una película erótica ¿Es raro? En absoluto. La sexualidad forma parte de la naturaleza del ser humano y es habitual que en determinados momentos nos haga una llamada de atención.
- ¿Por qué quiero ver porno? Pues por la misma razón que a un hombre. Para satisfacer un deseo o para relajarte.
- ¿Las películas X producen beneficios o daños? Prevalece lo positivo sobre lo negativo. Producen placer físico, psicológico, nos ayudan a liberar tensiones y pueden ponernos a tono antes de tener sexo con nuestra pareja o de darnos placer a nosotros mismos. Por el contrario una sobre exposición a esta pornografía puede hacernos adictos, pero esto no es lo habitual.
Erotismo en pareja
La pornografía puede formar parte de la relación y, en ocasiones, hasta llega a ser recomendable. Viéndolo en un vídeo podemos descubrir nuevas posibilidades, explicar a nuestra pareja qué queremos hacer en la cama o preparar nuestro cuerpo para tener relaciones sexuales. También contribuye a dejar volar nuestra imaginación. Si te apetece ver una película porno con tu chico, o con tu chica, coméntaselo. Lo más seguro es que la respuesta sea afirmativa y los dos paséis un buen rato.
Las mujeres que ven porno no son raras, ni pocas. El erotismo está a su alcance, al igual que al de los hombres. Y puede ser disfrutado en pareja o en solitario. Tú decides lo que quieres ver y hacer en cada momento y nadie tiene que impedirte hacerlo.