Hoy en día tenemos la suerte de conocer muchos más tipos de sexualidades y se están eliminando algunos tabúes que no habían dejado vivir con normalidad a muchas personas. Algunas de ellas han sido aceptadas por la sociedad y totalmente normalizadas, por lo que para futuras generaciones será muy extraño pensar que esto realmente no fue normal hace algunos años atrás.
Sin embargo, todavía desconocemos algunos tipos de atracciones o prácticas sexuales, como es la gerontofilia. Se denomina gerontofílico a la atracción que sienten algunas personas, más o menos jóvenes, por aquellas de la tercera edad, por los ancianos. Existen varios grados de atracción por parte del gerontofílico. Están aquellos que simplemente quieren rodearse de personas mayores, porque los consideran más calmados y con mayor experiencia y, los del extremo opuesto, que se sienten sexualmente atraídos por la gente de la tercera edad y los considera como una pareja solamente sexual o bien se plantean tener una relación estable con ellas, más allá del sexo, traspasando todas las barreras del amor.
En Bekia te contamos qué es la gerontofilia para que conozcas mejor esta actividad sexual que se considera fuera de lo normal pero que, siempre que cuente con el consentimiento de ambas personas mayores de edad, está aceptada.
¿Qué es un gerontofílio?
Un o una gerontofílico es una persona joven que siente atracción por aquellas de la tercera edad. En el caso de ser un hombre joven atraído por una mujer anciana se llama alfamegamia y en los que es una mujer joven atraída por un hombre mayor se denomina aniligamia.
No todas las personas que sienten gerontofilia tienen el mismo grado de atracción por las personas mayores. Algunos de ellos simplemente tienen la necesidad de rodearse por aquellos de la tercera edad por motivos psicológicos, ya sea porque tienen muy buenas experiencias en su vida pasada con ellos, porque les gusta la tranquilidad y la sabiduría que les transmiten etcétera.
No obstante, este estado de atracción puede ser más o menos intenso, por lo que existen otras personas que cada vez tienen una necesidad física mayor por las personas mayores y no solamente se conforman con compartir su tiempo con ellos, sino que también sienten una atracción sexual.
Si la atracción es mutua y consentida esta actividad sexual no deja de estar permitida en algunos países, siempre que el o la joven sea mayor de edad. Sin embargo, como es una actividad poco conocida y practicada, por eso entra dentro de la categoría de las filias.
En el caso de que ninguno de los dos esté de acuerdo con realizar esta actividad sexual o no se sienta atraído estaremos hablando de casos muchos más graves, como la violación o un matrimonio obligado, y la persona afectada deberá tomar medidas lo antes posible.
Esto sucede en muchos países y no ayuda a la imagen del gerontofílico, puesto que la mayoría podría pensar que los ancianos se casan solamente con los jóvenes en contra de su voluntad, siendo la persona joven forzada a hacer algo que no quiere en realidad, o bien que algo extraño está sucediendo, es decir, que algún interés material querrá conseguir la persona joven de la mayor con su muerte.
Estas ideas preconcebidas no siempre son verdaderas y cada caso en concreto será siempre diferente. Puede que nos sea difícil de creer, pero realmente hay personas jóvenes que pueden enamorarse de un anciano o sentir atracción sexual, disfrutar de su compañía e incluso hacer planes de futuro juntos.
Gerontofilia ¿Sólo sexo?
No todas las personas que se encuentran dentro de la gerontofilia tienen solamente una atracción sexual por las personas mayores. Aquellos que disfrutan solamente con su compañía, quizás nunca lleguen a querer más que una simple amistad y, por otro lado, aquellos que sientan atracción física también pueden llegar a enamorarse y querer tener una relación estable.
No obstante, esto no le será del todo fácil. La gerontofilia es considerada una filia, es decir, una actividad sexual poco común, y esto es porque normalmente las personas suelen sentirse atraídas por aquellas de una franja de edad similar o inferior. Por eso, que una persona joven se sienta atraída por otra de la tercera edad es algo que la sociedad tiene problemas para comprender.
Pero si el amor entre estas dos personas es muy fuerte no tienen porqué renunciar a él. La persona joven debe tener presente que una persona anciana no tiene la misma libertad de movimiento ni piense del mismo modo que lo hace él. Viven en dos generaciones completamente distintas y la relación puede hacerse muy complicada. Además en muchos países no está permitida y, en los que lo está, la carga social es muy alta, puesto que la gente no tiende a entender a aquello que está fuera de lo común.
El sexo y el amor con ancianos por parte de personas jóvenes no es algo muy común ni en la calle ni en referentes como el cine o la literatura, por eso es una práctica que la gente no puede llegar a comprender todavía. Quizás si el sexo y el amor con los ancianos se hiciese popular entre los jóvenes la gerontofilia dejaría de ser un tema tabú y muchas personas podrían llegar a comprenderlo. No obstante, esto no es así porque la mayoría de jóvenes prefieren tener relaciones y sexo con personas de su misma edad o parecida. Los gustos y las ambiciones son más similares, además que un anciano se encuentra en la etapa final de su vida.
Algunos psicólogos creen que la atracción o el amor que pueden tener estos jóvenes por la gente mayor es causado por algún trastorno psicológico durante la infancia que les ha hecho creer que una anciano es una persona más cercana a ellos y solamente pueden encontrar de este modo el amor. Sin embargo, existen muchas maneras de quererse por lo que esta teoría no está del todo confirmada. Siempre que el amor sea libre y ambas personas consientan, no existen límites en muchos países respecto a esta práctica sexual.