Es posible que hayas escuchado muchas prácticas sexuales e incluso, que hayas practicado gran parte de ellas. Pero quizá no sabes qué es practicar el gagging, esta práctica sexual extrema. Esta práctica sexual se puede realizar tanto entre hombres como en mujeres, incluso las mujeres que tienen relaciones sexuales con mujeres también pueden practicarlo con un juguete sexual en forma de pene.
Qué es el gagging
El gagging es una práctica sexual extrema donde una de las personas hace una felación donde se practica 'la garganta profunda' pero en el extremo. No solo consiste en hacer una felación donde se introduce el pene en su totalidad dentro de la cavidad bucal de la persona que está practicando la felación, sino que incluso se puede llegar a estrangular el pene en este acto y que la persona que tiene el pene en la boca esté amordazada.
El gagging es una práctica sexual que puede ser muy placentera para las dos partes de la parejaEn el gagging extremo se amordaza a la persona que hará la felación y el hombre, en estos casos, penetra la boca de la persona que hace la felación con movimientos extremos tal y como si estuviera penetrando una vagina o un ano. Es como si estuviera manteniendo relaciones sexuales con la cabeza de la persona que le está haciendo la felación. Por lo que la persona que hace la felación tiene un papel menos activo, puesto que el ritmo de la felación no la realiza la persona que está con el pene en la boca, sino el hombre. De esta manera el hombre que penetra la boca de la otra persona es quien, dependiendo del gusto y el placer que sienta aumenta o disminuye el ritmo de los movimientos.
Los peligros del gagging
Para muchos, el gagging puede ser realmente excitante, sobre todo para aquellos hombres que fantasean con que les hagan una felación extrema donde sean ellos quienes lleven el control absoluto del movimiento del pene dentro de la boca.
Hay que tener cuidado con la otra persona a la hora de realizar el gagging y no sobrepasar los límites establecidos El gagging al ser sexo oral extremo y agresivo donde el pene puede llegar incluso hasta el final de la garganta e incluso principios de la laringe, no es tan bonito como parece. Esta práctica puede provocar ahogos, arcadas y hasta vómitos, quitando por tanto, toda la excitación del momento... o no. Hay quienes comparan esta práctica con 'hacerle el amor a una cabeza humana'. Aunque suene extremo la realidad es que puede parecer eso exactamente.
Pero aunque hayan momentos de babeos, arcadas e incluso vómitos, tanto los hombres como las personas que practican la felación profunda sin duda, pueden disfrutar mucho de esta práctica sexual extrema por el morbo que da practicarla.
Diferentes posturas
Hay diferentes posturas para realizar el gagging aunque lo más habtiual es que la persona que va a practicar la felación se arrodille delante del pene para que el hombre le penetre la boca y pueda practicar el gagging. Tumbarse en la cama boca arriba y que el hombre penetre la boca también puede ser una postura para el gagging. Aunque la postura más cómoda en muchos casos es que la persona que practica la felación esté medio recostado y el hombre pueda dominar los movimientos en una postura de semi-arrodillado.
Según la confianza que tengas con tu pareja y lo apasionados que seáis podéis utilizar mordazas En todas las posturas la persona que introduce el pene en la boca del otro suele coger la cabeza por la parte de la nuca y mover la cabeza al ritmo adecuado para sentir más placer, siempre y cuando, se tenga cuidado para no hacer daño a la persona que está practicando la felación extrema.
En todos los casos, puede ser una práctica muy excitante, aunque se debe tener en cuenta las necesidades de la persona que tiene el pene en la boca, puesto que si necesita parar para respirar o tiene arcadas, habrá que parar de practicar el gagging para evitar posibles ahogos o asfixias. Para poder disfrutar de esta práctica sexual es necesario ser responsable y aunque dé morbo, tener en cuenta el bienestar de las personas que están practicando la relación sexual. El gagging puede ser muy excitante y para practicarlo, siempre es mejor que lo comuniques a tu pareja sexual para que no se sienta presionado a hacerlo si no quiere o no le parece bien. Tu pareja sexual debe parar siempre que lo considere necesario.
