Cómo seducir a un hombre en la cama

Cada hombre es un mundo y no podríamos generalizar en lo que buscan o dejan de buscar los hombres en el sexo, pero sí podríamos hablar de lo que abunda en los hombres por un sentido más bien natural e irracional. Comúnmente, cuando se hace el amor en la cama o se practica sexo salvaje lo que se busca es el placer hasta llegar al orgasmo. Aún así, hay varias formas de ayudar a este orgasmo a que sea más excitante y esa relación más placentera.

Los hombres en el sexo

Es de sobra conocida la idea, preconcebida, de que los hombres sólo piensan en sexo, pero nada más lejos de la realidad. Los hombres también tienen esos días en que no quieren practicar sexo o esos momentos de estrés en que no saben si podrán darlo todo de sí. A pesar de ello, pocas veces suelen decir que no al amor, pues sentirían que están fallando a los deseos de su mujer.

Averigua lo que le gusta cuando estéis en situación

Si tú eres una mujer y quieres saber lo que le gusta a tu hombre en la cama, no seas vergonzosa y pregúntaselo, pero hazlo en la cama. Agobiar a un hombre con temas sexuales y prepararle para lo que va a venir a la hora de practicar el sexo puede resultar estresante y él sentirá que debe estar a la altura de lo que habéis hablado, esto le hará sentirse abrumado durante el sexo e incluso podría afectar en la erección de su pene. En cambio, si mientras estáis haciendo el amor le preguntas a tu hombre algo sugerente sobre lo que le apetece hacer, todo irá mejor y él verá claras las actividades que en ese momento le apetece llevar a cabo.

A los hombres les gusta el placer en una relación de sexo rápido de vez en cuando, pero también disfrutan con unos preliminares románticos, una cena juntos, una copa y todas esas cosas que se asocian normalmente con los gustos de la mujer. Muchos piensan que la mejor manera de conquistar a un hombre es con una buena cena, ligera y con una copa, algo que les permita estar saciados pero activos durante el sexo.

¿Son tan diferentes las mujeres de los hombres?

A pesar de lo que muchos piensan, los hombres y las mujeres no son tan diferentes en el sexo. Cada hombre tiene sus gustos personales, pero al final todos hacen el amor con un fin, el placer durante el acto y un orgasmo final.

No hay demasiadas diferencias entre los hombres y las mujeres

Ambos sexos disfrutan de las caricias apasionadas, el contacto físico continuo. No es interesante que al comenzar la relación vayas directamente a su pene, espera un poco, entrad en calor. Si te centras en su pene desde el primer momento y no lo sueltas hasta el momento del orgasmo, seguramente la relación durará menos de lo deseado.

• Deja que él se mueva cuando creas que le apetece moverse, y muévete tú cuando te apetezca moverte. Él es quien tiene que mantener su pene en erección y sabrá muy bien lo que más le excita en cada momento. A muchos hombres les gusta mostrarse sumisos en la cama, dejar que sea la mujer quien domine la situación y elija qué hacer en cada momento, pero otros muchos hombres prefieren trabajar ellos mismos el placer e intentar que la mujer llegue al orgasmo.
• A la hora de ir a la cama, por la noche, no rechaces a tu hombre con excusas malas si se siente excitado y quiere mantener relaciones sexuales. Si no te apetece, házselo ver desde un principio, pero las famosas frases para evitar el sexo son muy inconvenientes ya que harán que este deje de sentirse excitado. A ningún hombre le gusta saber que practicará sexo sólo cuando quiera su mujer. Ambos debéis tener la última palabra a la hora de comenzar una relación sexual.
• Hay momentos que lo piden a gritos, y es en estos momentos cuando los dos sentiréis que ha llegado la hora del sexo. Cuando esto suceda, acércate a tu chico y acaríciale, bésale, empieza tú la relación para que tu hombre sienta que estás preparada para hacer el amor.

Fantasías sexuales

No hay nada que le guste más a un hombre en la cama que cumplir sus fantasías sexuales. Para conocerlas, es posible que tengas que hablarlo con él para que te explique las cosas que le apetece realizar o que cree que le darán más placer. Pero lo perfecto es que tú misma lo averigües sin necesidad de hablarlo con él. Si consigues realizar sus fantasías sin que él te las haya contado estarás manteniendo la esencia de la fantasía. En cambio, cuando una fantasía viene preparada de antemano puede parecer un poco teatrera.

Piensa que hay muchas fantasías que van más allá de su pene y de las cosas que este puede hacer con él. Puede que tu chico quiera hacerlo en un lugar especial, o realizar una postura diferente, hacer un juego de disfraces o hacerlo mirando una película pornográfica. Son tantas las fantasías que existen en la mente de una persona que no podríamos elegir una al azar. Aún así, puede suceder que estés dando un paseo con tu chico por la montaña y de repente se insinúe para que practiquéis sexo al aire libre. Obviamente en ese momento tu chico está contándote una fantasía y sería bonito que la llevaseis a cabo si tú estás por la labor.

Los juegos eróticos también pueden formar parte de las relaciones sexuales

Los juegos eróticos, como los dados o las cartas con deseos, son un buen método de averiguar las fantasías de tu acompañante. En este caso será el azar quien haga que debáis realizar una actividad que, tal vez, alguno de los dos estaba deseando.

Otro dato importante son tus fantasías. Comparte con él tus fantasía o mándale indirectas para que las entienda por él mismo. Si logras que él cumpla tus fantasías te mostrarás mucho más entregada en la cama y el sexo será mucho más placentero para los dos. Si tu chico ve que te sientes realmente excitada durante el sexo y piensa que es gracias a él, se vendrá arriba y se excitará mucho más. Esto hará que ambos sintáis realmente el placer y al fin, de una vez por todas, lleguéis juntos al orgasmo.