Una pareja puede sentir grandes sentimientos de depresión, tristeza y dolor cuando sus hijos son adultos y se independizan. Esto puede ocurrir cuando los hijos se van fuera a estudiar, cuando se independizan y se van a otra casa a vivir, se casan, etc. Las mujeres pueden ser más propensas a sentir el nido vacío que los hombres. A menudo, cuando los hijos dejan el hogar, las madres suelen pasar por otros momentos importantes en su vida como la menopausia o el cuidado de sus padres ya mayores. Los hombres también pueden experimentar sensaciones similares de pérdida con respecto a cuándo sus hijos se marchan de casa.
El síndrome del nido vacío no es un diagnóstico clínico, pero se conoce como un período de transición en el que muchas personas experimentan sentimientos profundos de soledad. Aunque los padres animan a sus hijos a ser independientes porque es lo que necesitan para poder convertirse en adultos de éxito, la experiencia puede ser igualmente bastante dolorosa.
El nido vacío
El nido vacío puede implicar una pérdida de identidad, de salud... Incluso si no se trata, se pueden crear otros problemas psicológicos. Para poder tratar estas heridas emocionales, es necesario llegar primero a la identidad de cada uno y saber qué es lo que está ocurriendo y cómo la vida está cambiando de nuevo.
Es necesario adaptarse a las nuevas circunstancias como una nueva etapa de la vida. Es importante identificar las nuevas funciones y los nuevos intereses para poder explorar, disfrutar de la nueva vida en pareja en intimidad... Ser consciente de que los hijos no se han marchado a otro planeta, simplemente se han independizado porque deben aprender a volar por sí mismos.
Cómo superar el síndrome del nido vacío
No hay que esperar a que los hijos se marchen de casa para comenzar el proceso de superación del nido vacío, sobre todo cuando se empiezan a tener sentimientos de tristeza solo de pensar que los hijos algún día se marcharán del hogar. Cuanto antes se empiecen a tomar medidas para superarlo mejor se podrá estar emocionalmente.
Al superar estas emociones cuando los niños son jóvenes, hará que gracias al haber trabajado gradualmente las emociones, se podrá sentir su marcha de forma menos dolorosa. Pero si no has planeado con anticipación tus emociones, entonces hay algunas estrategias básicas que puedes tener en cuenta:
1. Haz una lista de cosas por hacer en tu vida. Puedes incluir cosas como disfrutar de tu pareja, hacer viajes, disfrutar de la familia o amigos, hacer deporte, tener mascotas, impulsar tus conocimientos o profesión, etc.
2. Reconecta con tu pareja. Cuando se tienen hijos la vida en pareja o es lo mismo que cuando se está de nuevo en intimidad. Por eso, es importante buscar tiempo para reconectar en pareja y disfrutar de esa nueva etapa de amor. Un amor más maduro y más importante en vuestras vías.
3. Descubre nuevos intereses. No importa la edad que tengan tus hijos, mientras están en casa estarán ocupando gran parte de tu tiempo. Cuando no están es posible que sientas que tienes mucho más tiempo para dedicarte a ti mismo/a. En este caso, puedes buscar esos intereses que siempre te han gustado y que dejaste aparcados por tanto tiempo. ¡Los disfrutarás de nuevo! O quizá quieras experimentar otros intereses desconocidos pero interesantes para ti.
Ten en cuenta que es totalmente normal experimentar sentimientos de pérdida o tristeza cuando notas la casa tan vacía. No te vas a sentir muy contento/a y es totalmente normal. Es un momento de transición... Pero es muy importante que no te centres solo en los sentimientos negativos que te provoca y que busques nuevas actividades e intereses que harán que te sientas mucho mejor emocionalmente y que superes el nido vacío.