Las relaciones sexuales deben ser placenteras. Sin embargo, el dolor al practicar sexo es una afección que sufre una de cada cinco mujeres, al menos en una etapa de su vida. La vergüenza, temores y tabúes del pasado impiden a muchas mujeres consultar a su ginecólogo para buscar una solución a este problema. Aquí te desvelamos todo lo que debes saber sobre la dispareunia. El primer paso es informarte, pero no olvides acudir al especialista.
¿Qué es la dispareunia?
La dispareunia es el dolor vaginal durante la penetración. En ocasiones estas molestias pueden producirse antes o después del coito. La menopausia y los meses posteriores a un embarazo son las etapas en las que más casos se registran. El lugar de la vagina en el que se registra el dolor, el momento personal en el que se da y la posible repetición del mismo resultan factores fundamentales a la hora de diagnosticar esta dolencia.
Así se distingue entre dispareunia primaria y secundaria en función de si el coito siempre ha sido doloroso o si con anterioridad las relaciones eran placenteras. También se divide tipológicamente en completa, si la penetración siempre es dolorosa; y situacional, si las molestias sólo se producen en determinadas condiciones.
Dispareunia versus vaginismo
Uno de los errores más comunes es la confusión entre dispareunia y vaginismo. La dispareunia puede producirse antes, durante o después del coito. Por su parte, el vaginismo es la imposibilidad de mantener relaciones sexuales. En este caso los músculos de la vagina se contraen de forma involuntaria impidiendo la penetración. El dolor en el vaginismo se produce sólo durante el coito. Por tanto, las mujeres que lo padecen pueden llevar una vida sexual satisfactoria si evitan la penetración.
Una dispareunia repetitiva puede provocar vaginismo. Este último cuenta como detonante, en la mayor parte de los casos, con causas psicológicas. Entre las dolencias con origen físico, por otra parte, se encuentran la vulvodinia y la vestibulitis vulvar.
- La vulvodinia es el dolor vulvar para el que no se encuentra explicación. Sus síntomas son ardor, punzadas, sequedad e irritación.
- Por su parte, la vestibulitis vulvar es el dolor que sufren algunas mujeres al tocar la entrada de la vagina. Estas molestias se producen en diferentes circunstancias, sean o no sexuales.
Causas de la dispareunia
Lo primero que se debe hacer es delimitar la zona en la que se registra el dolor. Sus causas variarán dependiendo de su localización. Si las molestias se producen a la entrada de la vagina pueden deberse a una falta de lubricación. Un gran número de factores afecta a la adecuada lubricación:
- Escasa estimulación previa
- Nerviosismo
- Estrés
- Temor al dolor durante la penetración si ya se ha sufrido con anterioridad
- Irritaciones o infecciones en el área genital pueden desencadenar también el dolor en esta zona
El posparto y la menopausia suelen provocar estos dolores. En el primer caso son la consecuencia de un parto doloroso y del temor a retomar las relaciones sexuales. En el caso de la menopausia se deben a la falta de estrógenos y los cambios hormonales registrados en esa etapa vital. Las reacciones alérgicas a determinados métodos anticonceptivos completan las posibilidades que desatan el dolor en la entrada de la vagina.
Cuando el dolor se sitúa en el fondo de la vagina sus causas son diferentes. Una infección del útero o los ovarios puede ser la causante del dolor. Se caracteriza por estar acompañada de un flujo de color y olor diferente al habitual. Otras afecciones como la endometriosis, los problemas intestinales e incluso las hemorroides, también pueden dar origen al sexo doloroso.
Tratamiento de la dispareunia
Visita a tu especialista si sufres dolores durante tus relaciones sexuales. El ginecólogo te ayudará a determinar las causas de tu dolencia y decidirá cómo tratarla. En algunos casos la dispareunia se trata simplemente con pastillas y en otros más graves es necesaria la cirugía.
Es necesario tener en cuenta que las condiciones emocionales y psicológicas de cada persona afectan a sus relaciones sexuales. Por ello, en muchos casos la dispareunia deberá ser tratada por psicólogos. Ansiedad, depresión y antecedentes de abusos sexuales pueden impedir unas relaciones sexuales placenteras.
Prevención de la dispareunia
Uno de los factores clave a la hora de evitar el dolor durante el sexo es la relajación. Disfruta de tu sexualidad y tómate el tiempo necesario para lograr que sea placentera. En ocasiones basta con dedicar más tiempo a los preliminares para mejorar así la lubricación y evitar el dolor durante la penetración. Los juegos eróticos y la masturbación pueden ayudarte.
Si el dolor ha aparecido de repente, detente a pensar si algo lo ha podido causar: un nuevo gel, la ingesta de medicamentos... Si no logras dar con una respuesta acude al ginecólogo y no pongas tu salud sexual en juego. Olvida tus temores y disfruta de una vida sexual placentera.