Cura contra la sequedad vaginal

Esta puede presentarse con diversos síntomas como: una molestia en la vagina, picores, reducción de deseo sexual o dolor durante la penetración. Siempre que notes alguna de estas dolencias deberás acudir a tu ginecólogo para que te recomiende el mejor tratamiento.

Qué es la sequedad vaginal

Cuando los tejidos del sexo o vagina no están bien lubricados la zona se encuentra mucho más seca de lo normal, lo que es causado por la disminución de la cantidad de estrógenos en el cuerpo de la mujer. Los tejidos de la vagina están normalmente lubricados porque los estrógenos se encuentran en su justa medida. Esto hace que no tengamos molestias, dolor o dificultad para tener sexo. Sin embargo, a causa del estrés, algunos medicamentos o la ropa interior que utilicemos podemos coger resequedad vaginal, lo que además de ser molesto deberá ser tratado por un profesional lo antes posible.

La sequedad vaginal dificulta las relaciones sexuales con tu pareja

Si tenemos resequedad vaginal lo notaremos porque al tener sexo nos dolerá esta zona del cuerpo , a veces este dolor irá acompañado de un leve sangrado. Otros síntomas serán el picor, el escozor al orinar y la disminución del flujo. Las causas que generan la sequedad vaginal son muchas y muy diversas como en nuestra salud y sexualidad, por ejemplo, la utilización de jabones no específicos para las zonas íntimas, la ropa interior de un material que no sea algodón y que no transpire, la ingestión de ciertos medicamentos, el uso de tampones y/o preservativos, el estrés, el tabaquismo, etcétera.

Cura contra la sequedad vaginal

Si tenemos alguno de estos síntomas deberemos asistir a nuestro ginecólogo lo antes posible. Él será capaz de diagnosticarnos y de aconsejarnos con el mejor tratamiento.Normalmente, suelen aconsejar el uso de algunas cremas o lubricantes con tal de aumentar el nivel de flujo en la zona vaginal y que no esté tan seca para facilitar el sexo o los posibles problemas de la sexualidad.

Al reducir el nivel de resequedad aliviaremos muchas de las dolencias y, además, nos será más fácil tener relaciones de sexualidad evitando el sangrado u otras inconveniencias. Este tipo de lubricantes, como la vaselina, los podremos encontrar en cualquier tienda de productos sexuales o supermercados. No obstante, si tu caso es más complicado quizás el ginecólogo te recomiende aplicarte alguna crema con estrógenos con tal de aumentar en número de los que tengas actualmente en la vagina y así a la larga no tener que volver a utilizar más lubricantes, ya que tu propio cuerpo será capaz de lubricarse por si solo.

Para paliar esta problema es aconsejable visitar a tu ginecólogo

Si no nos aplicamos la cura contra resequedad vaginal lo antes posible puede que nos veamos afectados por otras enfermedades como, por ejemplo, la aparición de hongos, fisuras o heridas más grandes al tener relaciones de sexualidad. Por eso, debemos aplicarnos el lubricante al mínimo dolor, acudir al médico si no se reduce y seguir el tratamiento de estrógenos como nos es indicado con tal de poder lubricar por nosotras mismas para no tener posibles problemas o complicaciones.

Es muy importante que para evitar la resequedad vaginal tengamos una dieta sana y equilibrada, no nos estresemos en exceso, consultemos con nuestro farmacéutico si tomamos alguna medicación diferente que pudiese causar este problema y que tengamos siempre juego previo antes de la penetración, puesto que este ayuda notablemente a la lubricación. Al mínimo síntoma o molestia en la sexualidad o salud no dudes en contactar a tu ginecólogo para ponerle fácil remedio lo antes posible y poder así seguir gozando de una vida sana, con salud y feliz.

Si no nos tratamos los síntomas de la sequedad vaginal lo antes posible, puede que no nos afecte a corto plazo en nuestra vida diaria, pero a la larga puede llegar a ocasionarnos muchos y diversos problemas. La cura es fácil e indolora por lo que no nos alterará nuestra cotidianidad y, a la vez, nos sentiremos más seguras y felices en nuestra sexualidad y día a día. Visita a tu ginecólogo al menos una vez al año para asegurarte de que todo sigue bien y no dudes en comentarle si tienes algún problema de ámbito sexual, por mínimo que te parezca. Él mejor que nadie podrá resolverte las dudas y ayudarte en caso de que sea necesario.