Apoyarse en los demás para afrontar y superar el divorcio

Al tomar la decisión de divorciarse cada cónyuge queda bastante afectado. Aunque quien abandona a su pareja experimenta emociones diferentes al abandonado (vergüenza y culpa en un caso, y dolor y rabia en el otro) realmente ambas personas tienen un grado de confusión emocional similar.

Tampoco tiene mucha influencia en este dolor la duración del matrimonio, pues hay estudios que dicen que el proceso de duelo puede ser tan profundo en un matrimonio que ha durado cuatro años como en otro de treinta, pues se necesitan de 2 a 3 años para establecer un vínculo sólido y real con la pareja y, una vez que se ha creado, la separación será traumática siempre.

Buscando apoyo en los demás

Muchas personas dirán que su pareja les hizo un favor divorciándose de ellas o forzando la situación para tomar la decisión por sí mismos, y que la ruptura fue una liberación personal beneficiosa. Pero en cambio muchas otras personas no están preparadas para aceptar la separación y tienen la sensación de que no serán capaces de hacer nada sino es con su pareja.

No hay que avergonzarse por buscar compañía, consuelo, consejo o apoyo

Hay que buscar apoyo. Bien sea en los amigos, en la familia y si esto no fuera posible, buscando apoyo profesional en psicólogos o terapeutas. No hay que avergonzarse por buscar compañía, consuelo, consejo o apoyo en los demás cuando se tiene un problema personal. ¿Acaso tú no harías lo mismo por un ser querido? Entonces seguramente ellos harán lo mismo por ti, si realmente te aprecian.

Gracias a este apoyo cotidiano, poco a poco irás tranquilizándote y curándote del shock inicial, reforzándote en tu autoestima, algo muy importante para poder superar tu divorcio de forma positiva.

Hay que saber afrontar los nuevos cambios y el nuevo rol personal de cada uno. Lo común en un hombre es que a partir de ahora ya no es el dueño de un hogar con hijos que se ven todos los días, sino que vive en un apartamento, donde sus hijos vienen a estar con él dos fines de semana al mes y el resto del tiempo está solo. En una mujer se pasa de ser un ama de casa casada (aunque se tenga trabajo fuera del hogar) a colgarse la etiqueta de "divorciada", que de forma despectiva y según qué círculos sociales suele asociarse a una mujer "echada a perder" o "mujer en busca de hombre".

Con respecto a los nuevos roles sociales, en ambos casos hay que ser prácticos y responsabilizarse cada uno de su parte tanto en la parte económica (facturas que se pagaban conjuntamente ahora hay que hacerlo por separado ?luz, agua, teléfono, hipoteca, créditos...-) como en la de tareas caseras como limpieza, cuidado de hijos, mantenimiento del hogar, cocinar..., como en el círculo de amigos, donde debes asumir sin complejos ni vergüenzas tu nueva situación personal en el plano sentimental.

Repasar qué fue tu matrimonio

En el proceso de aflicción que antes comentábamos, la revisión de lo que pasó en tu matrimonio es importante para conseguir liberarte de tu pasado de forma positiva. Recordarás muchos momentos y situaciones, donde verás quién tenía la culpa y que podrías haber hecho mejor en lo que a ti te concernía. También significa revivir los buenos momentos que pasaste con tu pareja. Es una toma de conciencia que puede durar varios meses, pero que te ayudará a liberar sentimientos reprimidos que, de otra forma, quedarían encerrados como si fueran una bomba de relojería. Has de comprender que tendrás sentimientos de fracaso, de rabia, de culpa, de pérdida y de abandono, pero que éstos son naturales en el proceso de duelo por el que estás pasando.

Es fácil que en esta revisión provoque en ti sentimientos de culpa, pero no es malo pues significa que estás viendo de forma realista que el fracaso no fue sólo de una parte, sino de ambas, y podrás aprender de los errores para no volverlos a cometer en el futuro.