Ha llegado el día más feliz de vuestras vidas y habéis decidido casaros. Sin embargo, mientras se planea la boda también debemos pensar en ese pequeño viaje que realizaremos después con nuestro recién marido o mujer. Es muy importante escoger el viaje junto a tu pareja con tal de saber cuál es la destinación perfecta para ambos durante la luna de miel.
No solamente el lugar es esencial que sea del gusto de los recién casados, sino también las actividades que van a realizarse durante estas primeras vacaciones como marido y mujer, ya que si no son totalmente del gusto de ambos puede que esto afecte muy negativamente al recién estrenado matrimonio. Aquí encontrarás los sitios perfectos para irse de luna de miel después de una boda de ensueño.
Cómo viajar para irse de luna de miel
Antes de decidir el lugar donde queremos pasar la luna de miel, hay muchos otros factores a tener en cuenta. Si hace poco que habéis pasado unas vacaciones juntos en un destino similar, no será tan especial este viaje. Hay personas a las que les gusta más viajar en tren o en coche porque les da miedo ir en avión o, simplemente, no pueden costearse en billete en este momento. La decisión debe ser tomada entre ambos y tenéis que pasarlo bien juntos. Si económicamente no vais bien, y más justo después de todos los gastos de la boda, podéis pasar estas primeras vacaciones de casados en un lugar menos costoso.
No importa lo lejos que esté o si tenéis que hacer más o menos horas de avión. Este es un viaje para disfrutar con tu pareja, por lo que no tenéis que impresionar a nadie. Hay quienes pasan un viaje muy largo de avión para tumbarse en una playa paradisíaca pasándose todo el día peleándose con su pareja o muertos de asco por el aburrimiento. Casi mejor entonces hacer un corto viaje en coche o en tren a un lugar que os guste a ambos y sin necesidad de ostentar.
Unas vacaciones en pareja
La luna de miel es para que los recién casados puedan descansar de todo el estrés ocasionado por la preparación de la boda y el día en sí. Ahora, ya solos y casados, pueden disfrutar de unas vacaciones haciendo lo que a ellos más les guste. Si el nuevo matrimonio ha decidido en conjunto qué hacer ambos estarán muy a gusto durante la luna de miel.
¿Destino paradisiaco o ciudad romántica?
Normalmente a las parejas les gusta pasarse muchas horas en el avión e irse a una isla tropical al otro lado del charco. No obstante, también puedes viajar a París en tren con tu recién marido o mujer y pasar una romántica luna de miel en la ciudad del amor. Intenta no escoger una ciudad con demasiada gente y cosas que hacer. Estos días son para pasar juntos en tranquilidad y cualquier tipo de actividad estresante podría generar peleas innecesarias justo después del matrimonio.
Lugares tranquilos con playa o montaña
Para un destino de playa y relax más económico que irse a otro continente siempre puedes ir a una isla griega, Sardina o Sicilia. Estos lugares son tranquilos, con aguas cristalinas y, dependiendo de la zona, con poco turismo, bellos paisajes y comida sana. A quienes les guste viajar por la ciudad y tenga un presupuesto más escaso puede viajar en tren o coche por nuestro propio país y pasar unos bonitos días descubriendo muchas de las preciosas ciudades del territorio español.
Una bella manera de descubrir otras comunidades autónomas disfrutando de su cocina y paisajes sin prisa en tu propio coche y a tu manera. Así pues, no es tan importante el lugar para la luna de miel sino que el plan haya sido elaborado entre ambos en este nuevo matrimonio. Si a tu pareja le gusta ir a museos y tu prefieres descansar en la playa, buscad una destinación en la cual podáis hacer ambas cosas en conjunto, es decir, cada uno sacrificando un ratito, para el bien de este empezado matrimonio.
Sin duda, son muchos los planes que se pueden organizar para disfrutar de una excepcional luna de miel. Puedes elegir entre los destinos más espectaculares en los que descansar y vivir a cuerpo de rey o algunos más modestos pero igual de especiales y llenos de encanto. Todo esto dependerá, en gran medida, de la economía de la que dispongas, y también de los gustos de la pareja. Ambos os tenéis que poner de acuerdo y elegir el destino que más os llame la atención a los dos. Descansa durante tu luna de miel y dedícate a querer a tu pareja porque este es el primer viaje que hacéis juntos como casados para muchos que os esperan durante largos años de felicidad conjunta. ¡A vivir el momento!