Hay personas que ven en la diferencia de edad un problema a la hora de comenzar una relación sentimental. Ya sea porque la otra persona es mayor o menor, esta circunstancia puede provocar que la relación no llegue a fraguarse por esta diferencia. Complejos, falta de madurez o cualquier otra razón sirven para poner la diferencia de edad como excusa para no querer conocer a alguien. Por otro lado, existen personas para las que la edad es solo un número y no debe de ser algo determinante a la hora de empezar a conocer a una persona.
En este caso, nos vamos a centrar en aquellas relaciones en las que el hombre es menor que la mujer. Cómo influye la diferencia de edad, cómo lo pueden afrontar cada uno de los componentes de esa pareja. Aunque es verdad que cada persona puede afrontarlo de manera diferente, sí que hay algunos aspectos que pueden ser tenidos en cuenta de manera general para no cometer errores.
¿Funcionará la relación?
La respuesta no la tiene la edad. Los factores que pueden influir en que una relación funcione o no van mucho más allá de la cantidad de años que separen a las dos personas. Que la mujer sea mayor no implica que se tenga que notar en la pareja. La madurez de las personas no siempre tiene que ir en relación a la edad ya que, en muchas ocasiones, las propias vivencias de éstas son las que les hacen más o menos maduras.
La pasión que existe en una pareja no tiene nada que ver con la edad, sino con la efusividad que tengan las dos personas a la ahora de vivir el amor. Cuando dos personas se quieren, la edad no deja de ser un factor ajeno a su propia historia. Los sentimientos pueden estar por encima de muchas cosas y la edad no iba a ser menos. Si hay parejas que pueden sobrevivir a presiones familiares o externas no dándoles gran importancia, no habrá problema con los años de diferencia.
Por lo tanto, una relación entre un hombre y una mujer mayor funcionará siempre y cuando ésta tenga todos los componentes necesarios para que el amor fluya. No deja de ser una pareja como otra cualquiera formada por dos personas que se quieren y que quieren compartir sus vidas. Por lo tanto, los únicos problemas que puede haber son aquellos propios del día a día. El amor no tiene por qué dejarse influir por la diferencia de años.
Inconvenientes de una relación con una mujer mayor
Como acabamos de decir, si hay amor y pasión es muy complicado que la relación pueda ir mal ya que estos dos ingredientes son los principales para que ésta funcione. Aun así, dependiendo de en qué intervalo de edad nos encontremos sí que podemos encontrarnos algunos problemas. Además, las circunstancias personales de cada uno también pueden llegar a influir en la buena marcha de la relación.
Estar de acuerdo en los hijos
Por ejemplo, está el tema de los hijos. Este tema ha de ser tocado con mucho tacto ya que tienes que respetar a la otra persona. Cuando la mujer de la pareja es mayor, es posible que ya haya sido madre o que, pudiéndolo haber sido, haya optado por no serlo. En este caso, no se podría presionar a la mujer. Como cualquier otro tema que esté relacionado con la relación, habrá que llegar a un consenso entre los dos y tomar las decisiones de mutuo acuerdo.
Planes de futuro
Un poco relacionado con lo anterior pueden estar los planes de futuro de cada una de las personas que forman la pareja. Es posible que, al ser la mujer mayor, tenga unos planes muchos más asentados que el hombre por ser más joven. Aun así, esto se presupone por regla general. Como hemos dicho antes, la madurez de cada persona hará que esto pueda igualarse o, incluso, hacer que se intercambien los papeles. De todos modos, las decisiones han de ser en consenso.
Consejos para una relación con una mujer mayor
En verdad, no sería necesario ningún tipo de consejo más allá que saber conservar el amor y la pasión que conlleva una relación. Sí que es verdad que hay algunos aspectos a tener en cuenta, como los que hemos comentado en los inconvenientes, que pueden requerirnos un esfuerzo mayor al que normalmente tenemos que poner cuando tenemos una relación sentimental con alguien de nuestra edad.
- Paciencia y mente abierta: Esto hay que tenerlo en cuenta a la hora de tratar algunos temas que afecten directamente a la relación de pareja. Siempre hay que recurrir al diálogo como método de negociación ya que, de lo contrario, no se llegaría a ningún acuerdo y la relación no saldría bien en ningún caso. La empatía adquiere gran relevancia en este tipo de parejas, ya que ponernos en el lugar del otro nos ayudará a tomar las decisiones teniendo en cuenta distintos puntos de vista.
- Dejarte llevar: La edad es un inconveniente en el amor para aquellas personas que lo consideran una traba, pero no tiene por qué ser así. Nunca sabemos quién puede llegar a nuestras vidas o de quién nos vamos a enamorar. Al fin y al cabo, no dejan de ser personas que nos complementan y con las que nuestra vida es mucho más fácil. La pasión y la fuerza que da una pareja no entienden de edades, siempre y cuando los sentimientos entre las dos personas sean verdaderos y sinceros.