Nadie dijo que las primeras citas fuesen fáciles, pero es precisamente pretender que sean perfectas lo que lleva a muchas mujeres a cometer errores graves al comenzar lo que podría ser una relación exitosa. Y para que sea una relación con futuro, es preferible no cometer estas meteduras de pata, e intentar llevar estas citas con más calma. Algunos de los errores que se comenten son los siguientes:
1 No ser tú misma
Tal vez el error más común de muchas chicas es intentar agradar demasiado, hasta tal punto que olvidan quiénes son realmente con la ilusión de que, ocultando defectos o diferencias que podrían tener con el chico en cuestión, él siga interesado. Pero recuerda que si quieres que estas primeras citas se conviertan en algo más, sólo lo harán si él sabe desde un principio quién eres. Siempre es preferible estar al lado de quien te quiere por quién eres, y no por quién deberías ser.
2 Ser un pelín pesada en las redes sociales
Estás conociéndole. No pases enseguida de soltera a en una relación, no subas mil fotografías en las que sales con él, ¡y no le llenes el tablón con me gustas y te echo de menos ! Esto puede hacer que se sienta un poco agobiado y que no quiera seguir adelante con lo que estabais comenzando.
3 El vestido y los nombres
Aunque cueste reconocerlo, es verdad que muchas mujeres empiezan a imaginar hasta el nombre de sus futuros hijos cuando se ilusionan con un chico en cuestión. ¡No lo hagas! La mayoría de las veces, lo que se planifica mucho sale mal, si no fatal. Déjate llevar, disfruta del momento y recuerda que, si planeas demasiado y a largo plazo, cada vez que finalices una relación la sensación de vacío va a ser peor.
4 Pensar que te hará la vida perfecta
Si en tu vida hay vacíos causados por ciertos problemas, no pienses que, por el simple hecho de haber llegado a tu vida, él va a llenarlos. Si no te sientes feliz, tampoco lo serás con él. Es preferible que alcances esta felicidad por tu cuenta, para luego compartirla con otra persona, porque nadie va a darle a tu vida la alegría que le falta. Él no ha llegado a tu vida para salvarte.
5 No ponérselo difícil
Las primeras citas son como un juego, pero a nadie le gusta vencer a la primera en una batalla. Deja que te conquiste. Sobre todo, no le quites el espacio personal que necesita, sino que respeta su libertad.
6 Conformarse con poco
Es normal desear tener a alguien con quien compartir tu vida, pero lo que no es aceptable es estar con cualquier persona para no sentirte sola. Si no te hace feliz, si es machista y tú eres de lo más feminista, si no respeta a tus amigos, si no se preocupa por buscar un trabajo y disfruta demasiado del sofá, si te falta al respeto... ¡por mucho que lo creas, no le necesitas!
Antes de empezar a salir con alguien, es importante preguntarte si le ves en tu futuro. Piensa en esa persona que llevas esperando toda tu vida, y si este nuevo hombre no cumple con las expectativas... ¿para qué empezar algo que muy en el fondo no quieres para siempre? ¿Por qué conformarte con menos, si sabes lo que quieres?
7 Si no te has construido a ti misma antes
Descubre quién eres. Aprende lo que te gusta y lo que no, qué quieres para tu futuro y con quién te gustaría compartirlo, haz todo lo que te hace feliz en tu vida y empieza a perseguir todos tus sueños. Cuando aparezca un hombre en tu vida, estarás preparada para descubrir si él te complementa o no.
Muchas mujeres empiezan a salir con alguien sin saber realmente quiénes son, y esto es un problema porque al final la pareja se convierte en su vida. El error es no tener una vida propia, completa y satisfactoria, pues la nueva pareja se debería convertir simplemente en alguien con quien compartir lo que una ya tiene consolidado.
8 Obsesionarse
'Me ha puesto un corazón nada más en el mensaje, y no dos... Eso significa que no le gusto lo suficiente'. 'En nuestra cita no me ha preguntado cuándo podemos volver a vernos... eso es que no ha disfrutado de la tarde tanto como yo'. 'No me ha dado los buenos días esta mañana al conectarse... eso es que no se despierta pensando en mí'. ¡No lo hagas! ¡Deja de pensar tanto y de darle tantas vueltas a todo!