En la actualidad nadie se sorprende cuando una pareja con hijos decide divorciarse o separarse. Antiguamente estaba mal visto que una pareja que estaba casada o que tenía hijos se separase, y parecía que debían aguantar cualquier situación tóxica por mucho daño que se hicieran y sin tener en cuenta las horribles heridas emocionales que pudieran sufrir tanto la pareja como los hijos.
Pero afortunadamente, esto ha empezado a cambiar. Una pareja con hijos que no llevan una buena vida es mejor que vivan de forma separada y en armonía que juntos y de forma tóxica. La educación para los hijos será mucho más sana en una pareja que se lleva bien separada que cuando se llevan mal estando juntos. Aunque claro, cuando una pareja se separa y hay hijos de por medio, es necesario dejar a un lado el dolor emocional e intentar hacer las cosas bien en favor de los hijos.
Cuando las heridas emocionales están curadas, una pareja que se rompió pueden empezar a pensar en tener otras relaciones románticas y volverse a enamorar de nuevo. Pero, ¿cómo se puede conseguir que los hijos se lleven bien con la pareja actual? No siempre es tarea fácil, pero hay que saber cómo hacerlo para poder tener buenos resultados. No te pierdas estos cuatro pasos imprescindibles para poder hacerlo.
1 Ten en cuenta el momento adecuado, sin prisas
El primer encuentro entre tus hijos y tu nueva pareja tiene que ser una ocasión informal, como por ejemplo en un parque o en el cine. Lo que resulta primordial es que este encuentro no sea estresante y presenta a tu pareja como un amigo. No le beses ni le abraces la primera vez que tus hijos le ven para que puedan acostumbrarse a su presencia. Incluye a tus hijos en la conversación que mantengas con tu pareja.
Después permite que tu pareja pueda interactuar brevemente con tus hijos. Es importante también que puedas tener tiempo a solas con tus hijos, de igual modo que lo tendrías si no estuviese tu pareja delante.
También, deberás evitar presentar a tus hijos parejas que no sean estables. Los adultos que entran en la vida de los niños tendrán un gran impacto en la capacidad de tus hijos para tener relaciones duraderas en el futuro. Además, presentarle parejas temporales puede ser confuso para ellos.
2 En cuenta los sentimientos de tus hijos
Es muy importante hablar con tus hijos y escuchar todo lo que tienen que decirte. Sus sentimientos son lo primero y deberás respetarlos sin juzgarlos. Es necesario que antes de formalizar nada, hables con tus hijos y les expliques la situación. Después, escucha lo difícil que puede ser para ellos y permite que te digan cualquier cosa que les preocupa y calma sus miedos e inseguridades.
Es necesario que encuentren la calma ya que pueden sentirse nerviosos, sobre todo si sienten que estás actuando de forma diferente o que no pareces la misma persona de siempre. Pueden sentir miedo a que se les preste menos atención, a que centres tu vida en tu pareja o incluso pueden sentir cierto rechazo si creen que la otra persona va a suplantar la figura materna o paterna del otro progenitor. Es muy importante calmar todos estos miedos e inseguridades.
Tus hijos deben saber que no pueden decidir en si tienes o no tienes una nueva pareja, pero la relación que tengan con ella creará un gran impacto en cómo funcionarán las cosas en familia. Si los niños sienten que el futuro de la familia se ha decidido teniendo en cuenta sus sentimientos, entonces no se sentirán enfadados ni molestos ante la nueva decisión. Por eso, es muy importante respetar sus sentimientos y calmar sus inseguridades ante la nueva situación.
3 Mantén el tiempo familiar como primera opción
Es imprescindible que los niños se sientan valorados y respetados, pero sobre todo, que sepan que no se disminuye ni un ápice la atención hacia ellos. Por todo esto, es necesario que priorices el tiempo en familia con tus hijos. Deberás evitar la inclusión de la nueva pareja mucho tiempo seguido en los primeros momentos.
Se debe desarrollar una relación con una base con un fuerte vínculo entre todos. Si te centras más en tu pareja que en tus hijos no podrás mantener las cosas en equilibrio, por este motivo puede que te sientas en la obligación de omitir algunas etapas de tu relación pero sin que esto suponga un menor compromiso.
Después de la separación o divorcio, tus hijos deben aceptarlo y después también deberán aceptar tu nueva relación . Dales tiempo para asimilar los nuevos cambios, pero durante este proceso ten en cuenta que ellos te necesitarán a su lado. Deben ser que siguen siendo tu prioridad.
4 Ten en cuenta tus sentimientos y mantén un buen control emocional
Si te das cuenta que tus hijos están comportándose mal o que no tienen un comportamiento deseado como tú esperabas que fuese-, entonces no te enfades para no dar poder a ese comportamiento negativo, piensa que quizá no se sienten bien ante tu nueva relación e intentan manipularte.
Cuando tus hijos se portan mal lo que es seguro es que están tratando de decirte algo. Por este motivo, deberás encontrar tiempo a solas con tus hijos de forma individual y respetar sus sentimientos. Hablar sobre lo que sienten y sobre qué es lo que les está haciendo actuar de ese modo.
Es posible que sientan un conflicto de lealtad hacia el otro progenitor, por lo que deberás darle a tus hijos es espacio y tiempo para que puedan formar su propia relación con tu nueva pareja. Respeta los sentimientos de tus hijos, incluso si no son los que te gustaría que fueran. De este modo, todo será más fácil.
Lo más importante es que puedas crear espacios donde poder hablar tranquilamente sobre la nueva situación y que tus hijos sientan que siempre serán tu proridad. El hecho de que tengas un nuevo amor en tu vida jamás será algo que les haga quedar en segundo puesto en tu lista de prioridades... pero deben entender que son diferentes formas de amar y que hay amor para todos. Confía en tu juicio y actúa siempre desde el corazón.