Dicen que cuando te casas es para toda la vida... Aunque no siempre tiene que ser así. Hay quienes que se casan una vez y otras personas que repiten por las diferentes circunstancias de la vida. Pero lo que es importante es que cuando se realizan los preparativos de la boda, no te vuelvas loca ni te estreses demasiado. El estrés en los preparativos nunca te ayudará a conseguir buenos resultados, así que desde la calma todo será mucho mejor. Además de involucrar a tu pareja en todo, sigue los siguientes consejos.
1 Planificación ante todo
Por tanto, la mejor manera de empezar a planificar los preparativos de tu boda es escribiendo todo lo que se te pase por la cabeza. Empieza a darle forma en el papel y así, cuando lo hayas escrito podrás pensar en cada paso con mayor claridad y darle forma real. Apunta todo lo que quieras para tu boda y después ves descartando ideas hasta que te quedes con las finales. Recuerda que para planificar las cosas, deberás tenerlo por escrito.
2 Hazlo todo con tiempo
Es buena idea hacerlo todo con tiempo, pero cuidado... no vayas a reservar el lugar de la celebración sin saber primero los invitados que tendrás confirmados para el día de tu boda. Es importante que tengas todo pensado con antelación desde que fijas la fecha de la boda. No esperes hasta el último momento para hacerlo todo, porque entonces vendrán las prisas, la falta de tiempo y acabarás pagando más por menos solo por tener las cosas listas en la fecha.
En cambio, si lo haces todo con el tiempo adecuado, podrás reservar el lugar, mirar el vestido tranquilamente y hacerle los arreglos necesarios, también podrás preparar los detalles de la boda, hablar con los invitados para saber sus necesidades alimenticias y tenerlas en cuenta en el menú, podrás ir a la prueba del menú con tiempo de sobra para decidir si quieres cambiar o no algo, podrás buscar un coche de novios adecuado a vuestros gustos personales, etc.
3 Pide presupuestos
No te quedes con lo primero que te digan. Es muy importante que preguntes presupuestos de cada cosa que quieras realizar en tu boda, desde el menú, el local, el DJ para tu música en la fiesta, los detalles de la boda para tus invitados... incluso para el vestido. Pide presupuestos en varios lugares para que de este modo puedas escoger el que mejor te convengan.
4 No te pases con la lista de invitados
La lista de invitados no tiene que hinchar tu ego. No es necesario que invites a esos primos que ni conoces en persona. ¿Para qué quieres personas que ni conoces o que ni te importan sentados delante de ti en un día tan importante como es el día de tu boda?
Piensa en las personas que realmente te importan y céntrate en ellas para invitarlas a tu boda. Será un día muy especial para ti y lo último que quieres es que exista falsedad en el ambiente.
5 Busca tu calma interior
Por supuesto, deberás buscar tu calma interior los días previos a la boda, por eso cuando vayas teniendo los preparativos listos, no dudes en buscar momentos de relax para ti y para tu bienestar interior. Busca momentos para ti, para tu disfrute y tu salud mental. ¿Te apetece irte de spa? ¿Quizá irte a un parque a leer al sol? ¡Date caprichos para mejorar tu salud emocional!