Le llamas cada tarde y cada noche para saber dónde está, si no te responde enseguida a tus mensajes te estresas demasiado, y es que necesitas saber qué hace y también con quién. Puede que incluso alguna vez hayas revisado su correo electrónico o los SMS que ha recibido en estas últimas semanas. Dejas de lado a tus amigas porque el sábado prefieres tener una cita romántica con él, a la luz de las velas y disfrutando de alguna comedia y de cenar juntos. Tal vez consideres que estos hábitos entran dentro de lo que se pueda considerar normal pero, si analizas bien la situación, puede que te des cuenta de que hay de por medio una dependencia emocional.
¿Qué es la dependencia emocional?
La dependencia emocional es un trastorno de personalidad y un trastorno adictivo que nos impide imaginar nuestra vida 'si él no está'. Tenemos un vacío que pretendemos llenar con la presencia de nuestra pareja, a quien sentimos que necesitamos, y tememos perderle y sentirnos en soledad.
La persona dependiente no analiza si su pareja le hace realmente feliz o no
En dependenciaemocional.org se describe a la pareja dependiente como alguien que tiene una larga lista de novios, muchas veces son muy poco tiempo de soltería entre una pareja y otra, porque esta persona no cree que puede ser feliz sin tener a otra persona a su lado. En muchas ocasiones, tal y como afirma la página, una nueva relación comienza de forma inmediata tras la última ruptura, incluso intentando a su vez retomar la relación que quedó rota.
Ahí también se habla sobre el síndome de abstinencia, que sucede cuando nos quedamos sin lo que nos gusta (sea nuestra pareja o una droga: se trata de la misma sensación). La persona dependiente no logra aceptar la ruptura y piensa de manera obsesiva en todos los recuerdos que tiene con esa persona, y en todas las posibles maneras para volver a estar junto a él. También se obsesiona por todo lo que ha hecho mal en la relación, y todo lo que podría haber hecho mejor. La página también menciona que este tipo de personas, una vez pierden a su pareja, pierden también las ganas de vivir, y sin embargo todo este sufrimiento desaparece de un segundo a otro si la expareja llama.
Las características
La persona dependiente necesita a su pareja para sentirse útil y eficaz, para sentirse completa y sobre todo para encontrar en sí misma esa seguridad que busca. Necesita tener una pareja, y rechaza el concepto de la soledad. Su baja autoestima le motiva a buscar la aprobación de los demás y, en vez de decir 'no', elige tener como prioridad los deseos de su pareja.
El dependiente no suele comenzar discusiones
Estas relaciones basadas en la dependencia, lejos de ser sanas, son adictivas y obsesivas, y como consecuencia la persona pierde su identidad y tiene que vivir exclusivamente para él. No existe libertad ni confianza, porque en la relación no hay opción para permitir a la pareja tomar sus propias decisiones sin miedo a que ella se pueda enfadar.
"Sin ti me muero". "Te quiero porque te necesito". "Sin mi novio no podría vivir". Son frases muy comunes de quienes tienen relaciones de dependencia, pero deberían modificarse para tener en cuenta que hay vida más allá de una pareja, y que por supuesto nadie muere por amor.
Posibles soluciones para no sentir dependencia
¿Existe una salida? Por supuesto que existe, y tienes todo tipo de alternativas. Haz actividades por tu cuenta y presta mucha atención a cómo, a pesar de no pasar las 24 horas junto a él, sigue queriéndote y sigue sintiéndose feliz al tenerte a su lado. Participa en talleres de autoestima y toma decisiones por ti misma sin consultárselo; siéntete independiente, valórate y verás como la solución está en ti.